Entonces, Genesis traza la promesa dada a Abraham de una generación a la siguiente, desde Abraham y Sara, hasta Isaac y Rebeca, y a Jacob. En cada generación Dios afirma su plan de multiplicar la descendencia y bendecir a las naciones por medio de su pueblo.

También supera grandes obstáculos con el fin de demostrar su compromiso inquebrantable  para desarrollar su plan de gracia. El mensaje general es claro: nada se interpone en el camino de Dios. Su plan de bendecir a las naciones a través de este linaje prometido es imparable. Traerá su gracia a nuestro mundo de pecado y sufrimiento. Vendrá un salvador.  

PARTES DE "UNFOLDING GRACE" TRADUCIDAS POR ANNE DYESS